Comarca de “Los Vélez”

La comarca, dominada por el impresionante Parque Natural Sierra María-Los Vélez, se sitúa en la parte más septentrional de la provincia de Almería, lindando con las provincias vecinas de Granada y Murcia. Su enclave en esta importante zona medioambiental le confiere gran parte de su atractivo turístico.

A modo de entrada a la provincia por el norte, posee un paisaje serrano que nada tiene que ver con el de otras comarcas, muy frondoso, con grandes bosques, contrastando con la aridez de otras zonas de Almería. Es su enclave también el que condiciona una forma de vivir muy rustica, de pleno contacto con el entorno, reclamo para los visitantes que busquen tranquilidad.

Los Vélez es cuna de figuras esquemáticas rupestres que son símbolo de la provincia, como el Indalo o el Hechicero. Esta es solo una muestra del rico patrimonio y bagaje monumental de poblaciones como Vélez Blanco o Vélez Rubio, reclamo para el turismo.

Pero es que, además, Los Vélez, por su particular situación geográfica, en plena serranía, es capaz de ofrecer a los visitantes la estampa de pueblos de montaña típicos como Chirivel o María, de pequeñas casitas blancas, donde el tiempo parece detenerse. En el invierno, las cumbres nevadas ofrecen un bello espectáculo.
La Comarca Velezana junto con su Parque Natural y la Sierra de María, figura como uno de los principales santuarios para todos los amantes del turismo activo, el deporte y la naturaleza. Sobre todo, para los amantes del senderismo, el agroturismo y la escalada.

La escalada es uno de los deportes estrella aquí en la sierra, pudiéndose practicar tanto en el Peñón de Pío o la Solana de Castellón, en Vélez Rubio o en el rocódromo de Chirivel .

El descanso, el relax, el entretenimiento y los espectáculos visuales en contacto con la naturaleza, están garantizados

El Parque Natural Sierra María-Los Vélez, con una extensión de 22.500 Has. Es un espectacular paraje de extrema belleza natural y paisajística. Aquí se localizan algunas de las cuevas más importantes del mundo. Dichas cuevas, albergan pinturas rupestres de gran interés arqueológico con una antigüedad superior a los 18.000 años.

Nuestra comarca, cuenta con 25 de los 79 yacimientos arqueológicos descubiertos en la provincia. Todos ellos se encuentran repartidos en las cuevas y abrigos rocosos que podrás localizar en todos y cada uno de nuestros municipios.

María

La localidad de María forma parte del Parque Natural que lleva su nombre, lo que condiciona que en esta localidad, situada en una altiplanicie, los inviernos sean gélidos y nevados y los veranos calurosos y cortos.

A más de mil metros de altura, María ofrece a los visitantes espectáculos visuales tan imponentes como el de sus campos de cereales, ya que es la mayor productora de la provincia, cambiando de color según las estaciones del año. Sin duda un buen escenario para la tradicional Romería de la Virgen de la Cabeza.

Sus famosos embutidos se complementan con un interesante patrimonio, del que destacan las pinturas rupestres de la Cueva de Haza y el poblado ibérico de El Pasico. Como ejemplo de arquitectura religiosa se encuentra la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Encarnación. Este templo es del s. XVI y es de reseñar su artesonado mudéjar y su portada con pilastras, arco de medio punto y alfiz enmarcando un reloj de sol. Tiene una torre cuadrada, rematada por una veleta con cuatro campanas y un reloj del s.XIX.

cortijo rural almeria

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Vélez Rubio

Paisajes que pasan desde el fondo de las ramblas a los llanos y lomas y desde estas a los escarpes y grandes alturas. Este es el entorno en el que se asienta la señorial localidad de Vélez Rubio, al pie del Mahimón, cabecera de comarca.

Su mayor esplendor y auge económico se daría en los s. XVIII y XIX, coincidiendo con la construcción de los elementos arquitectónicos más representativos, caracterizados por la variedad de estilos. Especial interés posee en esta localidad la arquitectura doméstica y de casas señoriales que, en Vélez Rubio presenta distintas tipologías que van desde las Mansiones Señoriales con influencia barroca de fachadas robustas y forja en balcones y ventanas, hasta las viviendas modernistas o historicistas de vistosa decoración y alegre colorido.

Las viviendas de los grandes propietarios de esta localidad hicieron que se creara un estilo propio, el llamado estilo clásico velezano, de fachadas blanqueadas y sumamente simétricas, construcciones en las que se le daba el lugar apropiado a cada balcón y ventana.

El patrimonio de Vélez-Rubio se enriquece aún más si se tienen en cuenta los yacimientos y restos de civilizaciones que alberga, así como los edificios religiosos. De los primeros son destacables el Yacimiento neolítico del Cerro de los López y los restos de la fortaleza islámica del Cerro del Castellón, de la cual se conservan restos de una alcazaba y un aljibe interior.

La iglesia de la Encarnación, templo del s. XVIII, es el máximo exponente del barroco religioso almeriense. Fue declarada Monumento Nacional en 1982 y de ella destaca su fachada ornamentada, concebida como un retablo, coronada por dos altas torres cuadradas y el retablo interior con motivos rococó. El Convento de la Inmaculada y su iglesia también son buenas muestras del Barroco.

Pero esta localidad ofrece, además, una gran variedad gastronómica que varía, singularmente, según las épocas del año. A los productos autóctonos como el cereal, la carne de caza, las verduras, legumbres y materias primas como la harina, se le unen platos típicos de Navidad como el arroz con pavo. Las tortas de bacalao es un exquisito plato que se degusta casi exclusivamente en época de Carnaval, al igual que el potaje de garbanzos con bacalao de Cuaresma.

Chirivel

Por Chirivel discurría la calzada romana Vía Augusta que unía Cartagena con Cádiz, lo que hace ver la importancia que el pueblo romano tuvo para el desarrollo de esta localidad que, por su paisaje, se asemeja más a Granada que al resto de la provincia.

Los huertos, bancales, cañadas, las extensas llanuras y mesetas, muestra de la fertilidad de una ribera que ha atraído a multitud de civilizaciones, son el marco incomparable donde se asienta este conjunto recoleto y tranquilo de blancas casas.

Se mantienen las típicas casas de tres plantas, siendo la última más baja, ya que era el antiguo lugar de almacén del grano y de cura de productos de la matanza del cerdo.

Sus muros gruesos de piedra acogen tradiciones de origen muy antiguo como son su repostería de raíces musulmanas, la artesanía de la miel y el esparto, que se encuentran ejemplificadas en el museo monográfico de la pedanía de Contador.

El yacimiento arqueológico de El Villar es muy importante, habiéndose encontrado en él piezas de origen romano tan valiosas como columnas y capiteles, un mosaico geométrico o habitaciones domésticas. Destacan también la Loma de las Cometas, los yacimientos del Pasillo de Chirivel, la iglesia parroquial de San Isidoro o un antiguo horno árabe en uso.

Vélez Blanco

A más de mil metros de altura, al amparo del Monte Mahimón, y en la falda de una colina coronada por su impresionante castillo, se alza majestuoso y monumental Vélez Blanco, localidad almeriense que ha visto pasar por sus tierras a pueblos como los íberos, romanos, visigodos o musulmanes.

Con la imponente sierra como telón de fondo, la población aún sigue ocupando una posición estratégica en la provincia, situación que ya aprovecharon los nazaríes para reforzar la frontera del reino de Granada. Finalmente, la villa se entregaría pacíficamente a los Reyes Católicos en 1488, hecho del que queda constancia en la sillería del coro de la Catedral de Toledo.

La herencia musulmana ha calado hondo en Vélez Blanco. De este pueblo se conserva casi intacta la estructura urbana, destacando el Barrio de la Morería y las fuentes: de los Caños de la Novia, Cinco Caños, Caños de Caravaca o Canos del Mesón, todas con aguas que bajan del Mahimón.
Si hay un adjetivo que la defina es el de monumental, por el rico patrimonio que guarda entre sus muros.

Los vestigios más antiguos se remontan a la Prehistoria, destacando las Cuevas de Ambrosio, importante yacimiento del Paleolítico Superior, o el Cerro de las Canteras, donde se encuentran los restos del mayor poblado y la necrópolis del Neolítico que existe en toda la Península.

Las mansiones señoriales de piedra y ladrillo, de influencia barroca, se sitúan en las principales calles de la ciudad, destacando la Casa de los Bañones o Casa de los Arcos, construida entre los siglos XVIII y XIX.

Pero si hay una visita obligada es la del Castillo Palacio del Marqués de los Vélez. Construido a principios del s. XVI, fue encargado a arquitectos italianos por el primer marques de la villa, D. Pedro Fajardo. Fue declarado Patrimonio Histórico-Artístico (1931). De la fortaleza solo se conserva el exterior, ya que la ornamentación interior fue vendida (hoy se puede contemplar en el Museo Metropolitano de Nueva York). Esta dividido en dos partes: la estructura rectangular de ladrillo de la antigua alcazaba y el cuerpo principal de mampostería, en restauración.

 

cortijo rural almeria

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